Con un espléndido concierto culminó el Proyecto "Taller de Jóvenes Músicos Chile-El Salvador 2019"

Con gran éxito de público culminó este domingo 9 de junio el Proyecto "Taller de Jóvenes Músicos Chile-El Salvador 2019", mediante un hermoso concierto que tuvo como escenario el Teatro Nacional de San Salvador (consulte la programación en la parte inferior de la página). Dirigido por el maestro colombiano Carlos Botero, la actividad -que al ser totalmente gratuita permitió el acceso de un muy variado público de todas las edades a un formato de gran calidad- estuvo a cargo de la Filarmónica Juvenil Nacional (FJN), la Orquesta Infantil Metropolitana (OIM), el Coro Juvenil Nacional (CJN), la Filarmónica Juvenil de San Vicente (FJSV) y la Orquesta de Cuerdas de Ilobasco por la parte salvadoreña. La aportación chilena estuvo a cargo de la FOJI (Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles de Chile) mientras que la vecina Guatemala estuvo muy bien representada por las Orquestas Juveniles del Ministerio de Cultura de Guatemala. 

Este tipo de conciertos tienen un doble objetivo: por un lado, representan el "lado visible" de todas las actividades realizadas durante el Proyecto, que se traducen en horas de ensayos, clases y convivencia. Constituye así un importante refuerzo para las y los jóvenes músicos participantes, que se apropian de un escenario emblemático para trabajar con un director de primer nivel. Por otro, permite que el público -tanto cercano, como familiares o amigos como ajeno, personas interesadas en la música o que simplemente desean pasar un rato diferente- visualice el resultado de dicho trabajo y pueda disfrutar del resultado del Proyecto. Les dejamos aquí el enlace a un interesante vídeo al respecto. 

Por último, merece la pena resaltar que aunque el Proyecto haya finalizado formalmente sus efectos perdurarán en el tiempo. Lo harán no solo en los avances técnicos y académicos que decenas de jóvenes intérpretes han incorporado a su carrera musical y en las valiosísimas buenas prácticas que, procedentes de otros entornos, quedarán en El Salvador, Chile o Guatemala, sino también en las relaciones personales establecidas entre las y los participantes. Estas, probablemente, sean las de más calado, ya que tienen capital importancia cuando hablamos de adolescentes y jóvenes, quienes adquieren así una valiosísima ventana a otras realidades y fortalecen conceptos necesarios en estos tiempos, como el respeto, el cuidado o la tolerancia. ¡Que siga la música!

Ver programa del Concierto de Apertura.